La estética western se resiste a abandonar el lugar en el que se instaló la pasada temporada. La tendencia, una ligera inclinación hacia su lado más sexy. Y de eso va el look de hoy, de un sexy denim dress.
Preparar un post haciendo uso de mi propia imagen, casi me había olvidado. Durante las últimas semanas he hablado de desfiles, de pasarelas, de la alta costura, de tendencias, de movimientos culturales y/o contraculturales… Y todo ello sin necesidad de exhibición personal alguna.
Os haré una confesión. En cierta manera, ha sido un descanso no haber tenido que mostrarme durante un tiempo como la percha de mis propios outfits (reconozco lo absurdo de este pensamiento). Algo del todo lógico si lo que pretendo es mostrar mi estilo. Pero sí, en ocasiones, es fácil sentir algo de vértigo ante tanta exposición. Se trata solo de una consecuencia más de la era digital. Reflexiones y debates que nos plantea la fantástica, y a veces temida, revolución tecnológica a la que asistimos.
Terapia de choque. Aparco el discurso acerca del mayor o menor pudor a la hora de exhibir la imagen personal, para continuar con la presentación del look. Vestido denim, de tirantes y abotonado frontal. Blazer de pelo sintético y estampado animal print (una vez más repetimos moda, y por partida doble). Cerramos con naked sandals y bolso mini, ambos en ante negro.
Ya sabéis… enfundaos un sugerente denim dress y estrenad el otoño con un guiño sexy.
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